27/06/2015 16:25:54 - Xalapa, Ver. por Pablo Jair Ortega
Los
amigos de Víctor Fuentes estamos sumamente preocupados por las amenazas
de la asistente de Velázquez Mocos… Perdón, Yunes… ¿Más vale que se
cuide? ¿De qué? ¿De la gripa? ¿De la chikungunya? ¿De los peligrosos
mocos de Velázquez Yunes?
Porque en una de
esas, Velázquez Mocos… Perdón, Yunes… puede hacer una bolita de
mucosidad envenenada y aventarle el moco a Víctor Fuentes, así nomás de
malora.
O en una de esas, Velázquez Mocos…
Digo, Yunes… Le puede embarrar el lente con una selección de sus mejores
mocasines y echarle a perder las crónicas gráficas tan divertidas a las
que estamos acostumbrados ver.
Con tales
amenazas, estamos pensando exiliar a Víctor Fuentes a Ámsterdam o Las
Vegas, con una beca pagada por Sarita Ladrón de Guevara, rectora de la
UV, ya entrada en gastos de mandar a estudiantes madreados fuera del
país.
Pero antes que todo, las medidas
preliminares que estamos pidiendo los amigos de Víctor Fuentes es que se
le reconozca como uno de los periodistas que siempre cubrió el Congreso
del Estado, y por eso se propone cambiarle el nombre a la biblioteca
“José María Mata” y ponerle “Biblioteca Víctor Fuentes” o bautizar a la
Sala de Prensa con su nombre.
Otra medida
pertinente será cooperar para regalarle un impermeable al chaparrito
para evitar la posible lluvia de mocos que Velázquez Mocos… Digo, Yunes…
le prepare, pues versiones extraoficiales indican que el diputado se
está preparando para una ofensiva rascándose lo más profundo del cerebro
para juntar una cantidad considerable y arrojárselos cuando Fuentes
esté distraído.
Habría que decirle también al
maestro Juan Nicolás Callejas que le enseñara, como buen maestro, que le
enseñe modales y tacto político; que antes de enfrentar a un periodista
en público, las cosas se deben tomar con humor… Y de entrada limpiarse
las narices antes de salir al pleno, para no andarlos pegando debajo de
la curul.
Los amigos de Víctor Fuentes también
nos cuidaremos, no vaya siendo que en una de esas sintamos una bolita de
mocos enredada en la greña y de paso la #LadyAmenazas nos diga que nos
va a caer el moco…
¡Mocos, qué!