21/06/2012 01:50:49 - Xalapa, Ver. por Salvador Muñoz
Su cuerpo exhibía no sólo desnutrición
sino también un cuadro de roña o sarna. Unas croquetas y un poco de agua fue lo
más que se me ocurrió ofrecerle para mitigar su pena... le llamé
“Roñis”.
A pesar
de sus condiciones, “Roñis” aún guardaba nobleza en su corazón ante cualquier
llamado que se le hiciera. El menear de su cola al silbido o la palabra amable
era poco comparado con esa expresión en su cara matizada con el largo fleco en
sus ojos que contrastaba con la ausencia casi total de pelo en el resto de su
cuerpo.
Un día,
cuando llevaba croquetas para convidar a “Roñis”, me encontré con una increíble
sorpresa: ¡Ya tenía una casa!
Me
cuentan que una vecina que tiene tres perritos como “Reina” (la de la Dama y el
Vagabundo), acondicionó un rincón al pie del edificio, para ponerle un refugio.
Allí, agua y un plato de comida, gozaba el buen “Roñis”.
Conforme pasó el tiempo, las cosas
mejoraron para “Roñis”... su cuerpo empezó a ser cubierto de un pelo amarillo
¡lo estaban curando!
Una
noche, al pasar frente a su casa, la consternación de los vecinos era evidente.
Pregunté si algo le había ocurrido al perrito (omití el apodo por temor a
ofender a sus protectores), y me dijeron que no había regresado en todo el
día.
Mis
sospechas se concentraron en el Circo que hace algunas semanas estuvo por
Xalapa... se ofreció recompensa por él y nada... todos rogamos que donde quiera
que estuviera, estuviera bien... porque nunca volvió.
II
Solovino Malpica tiene su página en
“facebook”. Es un perro gris que ha encontrado refugio en la Técnica 3 de esta
ciudad capital. Alumnos y vecinos siempre tienen algo qué compartir con este
canino que, el pasado febrero, cuando cumplió años, tuvo más felicitaciones que
su servidor ¡incluso de su novia! del perro, no la mía.
Solovino es tocayo del otro
Solovino, el del Centro de la Ciudad. Apenas el martes se desató toda una
polémica cuando Salud Animal intentó llevárselo. Por la intervención de varias
personas que se negaron a que fuera “arrestado”, es que Solovino se
salvó.
En las
redes sociales se desató cantidad de comentarios a favor de Solovino y el
derecho a ser libre. Incluso, me atreví a mandarle un breve texto a la
presidenta municipal, vía facebook, que a continuación transcribo:
“Te
quiero pedir un favor: protege a Solovino, el perrito del centro. Es bueno. A
veces, en lugar de tomarme un café en la parroquia, prefiero comprarle croquetas
en la tienda de la esquina. Por favor, no dejes que se lo lleven”.
Es
evidente que no leyó mi mensaje. Aunque en el mejor de los casos, no obstante a
que se lo hayan llevado este miércoles a la perrera, espero que Elizabeth lo
proteja.
Solovino, lo escribo en la nota que
apareció en facebook cuando se lo quieren llevar, “es un personaje... es un
amigo... es paisaje del Centro pero sobre todo, es una agradable presencia
cuando lo ves y le hablas... siempre te recibe como si fuera un cuate al que
tiene años que no has visto”.
La
cantidad de muestras de afecto que muchos internautas hicieron respecto a
Solovino es de reconocer como también la actitud que se tomó para contra la
presidenta municipal... fueron muchos los ataques. Pero ninguna de ellas tiene
razón si a nuestras palabras no se les da valor... sí, me incluyo.
Si hay
alguien quien merezca el respeto de todos y el cariño de Solovino, es Filiberto
Lozano.
¿Y
Quién es “Filito” Lozano? Es el sujeto que ayer habló con Salud Animal para
adoptar a Solovino. “Ya llamé, mañana me lo dan. Llego a las 8 al Castillo y me
lo entregan a las 10, pero primero me lo debe autorizar (el doctor) Tobías
(encargado de Salud Animal en Xalapa)”, informaba Filito Lozano en las redes
sociales.
Como
haya sido, la acción de Elizabeth Morales así como el excelente trabajo de la
fotorreportera Gina Collins tuvo su fruto: Un hogar para Solovino.
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